martes, 18 de octubre de 2022

«¡Una noche mágica en Estambul, la gloria en forma de copa!»

 



Si pudiera volver hacia atrás repetiría mil veces todo lo vivido, todavía recuerdo aquella final de Champions League en Estambul.


-¡Hola abuelo! Nos ha dicho la abuela que estabas en la biblioteca leyendo y queríamos darte un beso.
-Mis chicas guapas, ¿Qué tal han ido hoy las clases?
-Muy bien abuelo, en educación física nos han pedido hacer un trabajo sobre el deportista de élite y hemos pensado en ti, la abuela nos ha dicho que tú fuiste un futbolista muy importante y que tu historia nos puede servir para nuestro proyecto.
-Yo estaré encantado de contaros mi historia, pero antes quiero más besos y un abrazo.
-¡Claro abuelo, eso está hecho!
-Mi gol en el minuto noventa y cinco sirvió para llevarnos la ansiada final y poder levantar al cielo turco La Orejona.

Han pasado treinta años y a mis cincuenta soy muy feliz recordando aquel momento como algo mágico, un placer indescriptible para un futbolista de élite, el mayor logro conseguido por mi equipo y por un servidor, treinta mil almas coreando mi nombre.

Pero sin duda, lo mejor de mi vida son mi familia y mis amigos(muchos aficionados se piensan que la vida de un futbolista de élite es lo más parecido al paraíso; pero no todo es color de rosa, hay momentos muy duros, de soledad, lesiones, envidia entre compañeros...), mi esposa es lo mejor que me ha pasado en la vida, seguido de mis tres hijos, y lo mejor de todo, vosotras, mis cuatro nietas, mi luz.

-¿En qué puesto jugabas abuelo?

- Fui un delantero centro en uno de los equipos españoles más punteros, de los de la vieja escuela, siempre estaba en el momento exacto cazando balones y convirtiendo goles sin parar.
¡Una noche mágica en Estambul,  la gloria en forma de copa!

No hay comentarios:

Publicar un comentario