Érase una vez una niña que soñaba con ser astronauta para abrazar las estrellas, esos cuerpos celestes que brillan con luz propia y que a Camila entusiasmaban desde que era una zagala, tumbarse a la luz de la luna y observar el cielo estrellado era su pasatiempo preferido. Cuando los adultos le hacían la típica pregunta, ¿Qué quieres ser de mayor? Nunca dudaba en su respuesta: astronauta, por supuesto.
Gran estudiante, ya en sexto de primaria elaboró un trabajo sobre el Sistema Solar de matrícula, estaba claro que el futuro de nuestra protagonista era el espacio exterior.Los años fueron pasando entre sus estudios, primeros amores y paseos por la chopera de Mansilla de las Mulas, (un pueblo de la provincia de León), escuchar correr el agua del río era su terapia preferida.
Llegaron los años universitarios, dejando atrás su localidad natal para cursar ingeniería aeroespacial en la Universidad de León, como podéis imaginar, obtuvo el doctorado con matrícula de honor, siendo la primera en su promoción.
Becada por la Unión Europea cursó varios másters de astronáutica y aeronáutica; llegando su primer trabajo en la ESA(Agencia Espacial Europea) como diseñadora de vehículos impulsores y artefactos colocados en el espacio exterior.
Era el momento de dar el salto final en su carrera aceptando la oferta de la NASA y su oportunidad para viajar al exterior del planeta en una misión a la Luna, su sueño hecho realidad, estar cerca de "sus estrellas".
Vinieron misiones relevantes, como ser la diseñadora jefe de el róver Perseverance , para explorar el Planeta Rojo.
Pero su máximo logro ha sido ser la primera astronauta formando parte de la primera expedición del hombre a Marte.
-Mayo de 2032, les habla la comandante García a bordo de la Experience 332, el amartizaje ha sido un éxito rotundo, salimos al exterior, objetivo conseguido.