Vivo en una sociedad que agoniza lentamente,la corrupción ha traspasado todos los limites sociales.La vecina del cuarto derecha me decía ayer que a su hija Claudia la habían denegado una beca de estudios y que no sabía como iba a sufragar los gastos de este curso,quinto de medicina,su hija se está planteando emigrar a Francia,país que la ha comunicado que se hace cargo de todos los gastos de este curso y de su especialización,pero que a cambio tendrá que empezar a ejercer en su país,al servicio de la sanidad francesa.
Sus notas son todas de matricula de honor,sera una gran médico,no tendremos el placer de gozar de sus conocimientos,lo peor de todo es que casos como el de Claudia,hay miles en España actualmente,una verdadera pena.
En el número cinco está Braulio,regenta una zapatería hace mas de cuarenta años,un local de barrio,con precios muy económicos,el género que vende es todo producto nacional,de buena calidad,hace diez años invirtió parte de sus ahorros en reformar el local, modernizándolo con un aire adecuado a la actualidad,en unos meses se jubila,le encantaría ceder el negocio a su hijo Aurelio,pero es casi seguro que Aurelio no pueda hacerse cargo, porque el negocio no le permitiría vivir decentemente con su mujer y sus dos hijos,casi no tiene beneficios,todas las ventas se las lleva el chino de la esquina,que tiene mayor variedad y menores precios,pero con peor calidad y mas beneficios,esosi libre de impuestos,por supuesto los beneficios son exportados a su país de origen,por lo que mi país no obtiene beneficio.
Mas adelante,en el dieciocho vive Paco el joyero,un hombre intelectual con muchas ganas de vivir pero el ánimo por los suelos,regenta una joyeria en el veinticinco,en el ultimo mes la han atracado tres veces,el seguro ya no cubre mas perdidas,si vuelve a suceder se verá inmerso en la ruina, que si es una banda española,que si del este,que si paquí que si pallá,Paco achaca los robos al paro y el hambre que se ha instalado en el barrio en los últimos dos años.
La calle languidece por momentos,voy paseando y al doblar la esquina ,veo que esta vacía,Julián el cuponero se ha ido con su hija al pueblo a trabajar las hortalizas,me dicen por aquí los lugareños que ya no vendía ni un mísero cupón.
Esta calle se ha quedado vacía de sentimientos,lo que antes era alegría y luminosidad es ahora tristeza y oscuridad.
Sus vecinos deambulan por sus aceras como zombies en busca de su comida,el paro es abrumador y un tanto por ciento muy elevado sobrevive gracias a la pensión de los abuelos.
Hay varias familias rozando el umbral de la pobreza,Josefa la del trece regentó hasta hace un año una mercería pero tuvo que cerrar por lo mismo,esta mierda de crisis traicionera,es viuda y tiene tres hijos a su cargo en edad escolar,viven a duras penas con la escasa pensión de viudedad,me comentaba hace unos días que sus hijos se van todas las noches a la cama sin cenar,con un vaso de leche y un mendrugo de pan,hace meses que no catan un pescado o un filete de novilla,doy gracias.. me decía,a los servicios sociales,que me proporcionan muchas cosas para salir adelante.
Este es el barrio de la melancolía,de los sollozos por las esquinas,de los trileros,de pequeños ladronzuelos que aprovechan la mínima para limpiarte la cartera,manteros por todas las esquinas,de locales regentados por asiáticos sin escrúpulos,de prostitutas que antes eran amas de casa o administrativas que se han visto obligadas a ejercer para dar de comer a sus hijos,el problema es que ya no hay dinero ni para un polvo.
Si señores si..este barrio languidece....muere de pena por las esquinas,la pobreza se adentra en sus entrañas como paja en el ojo ajeno,los políticos miran para otro lado,y mientras sus gentes agonizan ellos roban hasta la saciedad sin importarles lo mas mínimo las consecuencias,y siguen paseando con su Ferrari por la Castellana.
Según el prisma de esta calle...podemos fijar el del resto del país,el señor presidente dice que la crisis ya se ha esfumado,pero me da la impresión que es una burda mentira.
Las fronteras se abren para una infinidad de refugiados de guerra que vienen moribundos,se les proporciona casa y comida,mas una asignación salarial,muy bien,son personas sufriendo,pero a mis paisanos de toda la vida,a mis vecinos de puerta..¿quien les ayuda?....
Es deplorable que en el siglo xxI estemos viviendo estas experiencias desagradables,y de mientras la clases altas mirando hacia el otro lado,aunque yo digo que torres mas altas han caído,igual mañana tienen que venir a mi bodega a pedir trabajo,si repito a mi bodega esa que voy a inaugurar en el local que dejó vacío Josefa,me la juego con mis ahorros,vuelvo a mis orígenes, a mi barrio,a la calle oficios,donde crecí fuerte y sano y en un ambiente maravilloso,entre todos lo conseguiremos,un país limpio y noble,porque aquí somos así gente humilde pero trabajadora,de esa catalogada con dos cojones.
Viva la sociedad libre,trabajadora y sostenible,de nobleza abrumadora y humildad a raudales.
Me mudo,vuelvo al barrio de la alegría.
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