-Y digo yo Federico...¿ Por que eres García Lorca verdad? Estaba tan embelesado leyendo sus andanzas por las calles de Nueva York que la pregunta es obligada, comprenderá que esto es inaudito.
- Lo soy, y vos... ¿Quién sois? -Yo soy un humilde lector de Poeta en Nueva York y demás libros suyos.
-A penas llevo un mes entre rascacielos y no he comenzado a escribir mis poemas , solo son versos en mi cabeza.
-No desespere Maestro, he llegado sin explicación, le diré que vengo del futuro, del siglo XXI, es difícil de asimilar, pero así es.
Creí que era un sueño, pero me temo que no. Estar aquí con usted conversando es real.
-Me va a perdonar, pensaba que en esta ciudad lo había visto todo, pero he de reconocer que esto es insuperable. ¿Qué ha ocurrido este último siglo?
Es muy difícil contestar; pero a grandes rasgos, el Planeta existe de milagro.
-¡Explíquese, por favor!
-Innumerables desastres naturales, guerras, odio, envidia... todo derivado por la mala acción del ser humano; mejor hablemos de otros menesteres.
Hábleme de usted y de sus amigos Buñuel, Alberti o Dalí.
-Acaba usted de nombrar a grandes amigos y compañeros. ¿También les conoce?
-Ya hubiera querido yo haberles conocido, lo que si le digo es que he leído y estudiado toda su vida y obra.
Me reclaman en el futuro nuevamente, sepa usted que sus obras serán leídas por millones de lectores, su legado es insuperable.
-Mucho gusto, hombre del futuro. -El placer es mío, quiero que me acepte un consejo, no me pregunte porqué, pero quédese en Norteamérica, España no merece la pena, se avecinan años malos.
- Valoraré su consejo, pero creo que si volveré, si lo que me espera es la muerte, que sea en mi país con arrojo y valor.
Como el mejor de los capitulos de El Ministerio del Tiempo :-D
ResponderEliminarTal cuál!
EliminarGran serie! Sería maravilloso poder experimentar esas sensaciones!